lunes, 3 de mayo de 2010

apesta a plástico

No creo en aquellos que predican amistades y no las respetan.
No creo en la deslealtad y el engaño de sentimientos, de situaciones.
Me descolocan las palabras afectuosas con veneno letal
inyectados minuciosamente en cada una de las vocales de la palabra
en cada una de sus consonantes

El mundo sucumbe por máscaras,
por el teatro de máscaras que nos ahoga,
no creo en los ojos, no creo en los labios.
Mi círculo cerrado, no creo en las intenciones
Mi círculo cerrado, no regalo mis palabras al viento.

Pero que bueno tener algunas ventanas que abrir, algunas miradas que descubrir
algunos pares de ojos a quienes sonreír.

No hay comentarios.: