miércoles, 8 de octubre de 2008

asimetría


Anteayer vino Desesperación
o al menos así me dijo que se llamaba
Desesperación me gritó, me sacudió
llego al escondite recóndito de mi alma
y una esponja estrujó, olía a libertad
olía a campo, a pintura, a mar y atardeceres
Fui tentada por el aroma de las riquezas terrenales
no aquellas materiales
sino las que te hacen sentir.
Quise libertad, quiero libertad.

Entre cuatro paredes estaba,
sin salida de emergencia,
blancas... blancas como todo lo que "debe ser"
y si no es no está
y si no está me desmayo,
yo no quiero alas ni sueños
prefiero caminar
o simplemente ser guiada por la nada
por mi cuerpo, por donde aquella brújula sensitiva quiere que vaya.

No soy compatible con los cuadrados perfectos
ni con los triángulos equiláteros.

2 comentarios:

Desmond Rentor. dijo...

pensar que la escritura y la matemática necesitan del otro siempre para q se entienda... es un asco, pero a la vez bueno...

te quiero luciana.
cuídate :)
besos.

Anónimo dijo...

me gustó ene, tiene una mezcla extraña...
y me encanta esa sensación también.
saludos luciana