jueves, 10 de enero de 2008

dialogos suspensivos


Las olas furiosas reventaban sobre las rocas, yo te decía que estaba bien, que todo se tranquilizaría, tu te hacías problema por las olas, quizás porque te asustaban mucho , porque siempre le has tenido miedo a lo desastroso, a lo que se sale de sus cabales, yo te decía que así es la vida, escandalosa e inquieta, que esas cosas simplemente hay que "disfrutarlas", tu te diste media vuelta y caminaste en otra dirección, dijiste que odiabas esa manera mía de ver los acontecimientos, que odiabas mi intranquilidad, mis gritos, hasta mis palabras, yo, como siempre idiotamente te tomé la mano para tratar de calmarte o detenerte, "no te vayas", pero a ti ni siquiera te importó mi melodrama adolescente y pueril , de hecho creo que nunca te importó lo que yo hacía por ti y ni siquiera te tomaste la molestia de voltearte a decirme algo. Aunque quieres hacerlo no lo haces, ya ni siquiera existes por eso, espero que nunca sea demasiado tarde.


1 comentario:

H dijo...

Saludos. No sabría decir si está bena tu página porq no leí todo, pero lo q ví me gustó. Me gustaría tener tiempo para hacer mi página tan reflexiva como la tuya. Te diría "Seguí así" pero esa frase tiene connotaciones complicadas q no voy a extenderme en explicar. Si crees en bendiciones, ahí te va la mía.