sábado, 18 de agosto de 2007

Sientes magia? esto es magia- esto es vida-


Lola caminaba por sus calles, sus calles húmedas, roñosas y llenas de los mas inconfundibles tonos que puedan existir. Con sus zapatos rojos de charol caminaba por el adoquín lleno de historias, sus ojos de un café profundo penetraban en el cielo cortándolo a pedazos y comiendo las nubes que imprudentemente se avecinaban por el lugar. Sus manos sostenían el objeto mas inconfundible para ella, su amigo de la vida, su confidente, su fuente de expresión de todos los sentimientos que tan apasionada y desvividamente ella sentía, su acordeón.
Lola llenaba sus calles de sentimiento, de melodías infinitas que partían su corazón en trozos e implícitamente salían a la luz del día, sus pies se movían al ritmo de la música, el ritmo tan suave y delicado que con el caer de un pañuelo podría llegar a quebrarse, pero al mismo tiempo tan fuerte e invasivo que hasta al hombre mas infeliz de la tierra se le podría haber dibujado una sonrisa en los labios.
Lola avanzaba y su música disminuía, se perdía en las mágicas calles, el aire la hacía parte de él, disolviéndola y reduciendo sus partículas a susurros de alegría, silbidos vacíos y con menos vida que las calles sin el acordeón.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que bonito, me lo imagino, con la música de fondo, muy lindo.
que lindo escrito luciana.
tu cuidate :)

Doy luz, por reflejar dijo...

tuquesiempreescribes...